El trío Ensueño, de la urbe oriental, fue recibido por sus colegas meridanos (una agrupación homónima) con quienes compartieron presentaciones públicas
Los dilatados vasos comunicantes entre la trova cubana y la yucateca acaban de recibir un nuevo estímulo mediante el intercambio entre dos agrupaciones de notable arraigo y apasionado ejercicio juglaresco, ambas con el mismo nombre, trío Ensueño, una de Mérida y la otra de Santiago de Cuba.
Desde finales de octubre y durante los primeros días de noviembre, los músicos de la urbe oriental fueron recibidos por sus colegas meridanos, con quienes compartieron presentaciones públicas de sumo impacto popular, como el que tuvo lugar en el Palacio de la Música de la ciudad, agendado en el programa Otoño Cultural 2023, precedido por conciertos ofrecidos en el centro Villa Bambú y el parque Santa Lucía, en el centro histórico.
Arropados por el maestro Luis Pérez Sabido, merecedor pocos meses atrás, en La Habana, del Premio Internacional Miguel Matamoros que confiere la Uneac, el Ensueño santiaguero, integrado por José Agustín Camejo, Orlando Lazo Vicente y Antonio Guisán de Zayas, desplegó un abanico de canciones tradicionales cubanas de Pepe Sánchez, Matamoros, María Teresa Vera, Isolina Carrillo, y como novedad, Perdone usted, de Enrique Bonne.
El Ensueño meridano defendió baluartes de la trova yucateca, erigidos por autores históricamente reconocidos como Guty Cárdenas, Coqui Navarro, Chucho Herrera, Carlos Duarte Moreno, Pepe Domínguez, Armando Manzanero, y el que se considera el primer bolero mexicano, Madrigal, compuesto en 1918 a cuatro manos por el juglar Enrique Galaz y el poeta Carlos R. Menéndez.
De tal manera, bajo el auspicio de las autoridades culturales yucatecas y la casa discográfica Egrem, se pudo cumplir un proyecto largamente abonado por el músico local Diego Cocom y el promotor y radialista santiaguero Gonzalo González, desde los días en que el Ensueño mexicano conquistó a los asistentes al Festival de la Trova Pepe Sánchez, en tierras orientales.
Cocom, que comparte faenas en el trío con sus colegas Armando Saldívar y Ricardo Jiménez Vallejo, es un avezado conocedor de la trova cubana. Según testimonio de la escritora Verónica García Rodríguez, directora del sitio digital Lectámbulos, la acogida a los cubanos continúa una saga forjada desde el pasado siglo por el yucateco Pepe Domínguez, que vivió y se despidió en La Habana; y Agustín Lara, cercano a Sindo Garay.
*Publicado en el periodico Granma de Cuba el 10 de noviembre de 2023.
