Ante la presión que aumenta para establecer un mundo multipolar, la reacción de los "defensores del y los Imperialismos", Estados Unidos -  Inglaterra, no se ha hecho esperar. Habrá que entender que esa presión se ejerció para transformar el Mercado Común Europeo, hacia una estructura militar.

Destruir a Rusia, una ambición de la OTAN, le permitiría a la Unión Europea, careta de los agresores, agregar esos países a su organización y con ello cercar a China y doblegarla hasta la redición.

La cuestión internacional no está sólo en la guerra de Ucrania - Rusia, sino que ha movido a las naciones a integrarse, para estar preparadas por cualquier acontecimiento o ejercer presión, por el sólo hecho de unirse en una región económica y política.

Ante los eventos mundiales que se perciben en el desarrollo político mundial, el gobierno americano está consciente que, para poder seguir sin perder el poder hegemónico, tendrá que lograr subvertir el orden interior de estas naciones y provocar condiciones de enfrentamiento entre las comunidades de los pueblos que eligen gobiernos progresistas, por otros más de acuerdo a sus intereses de dominación.

o se negocia una paz, de no saber cuánto duraría y a qué costo, con el vehemente deseo que sea muy larga; o se desata una guerra con costosísimas consecuencias para toda la Tierra.

Cuando se habla de “ayuda” a Ucrania, debe entenderse que son préstamos a largo o mediano plazo que ésta tendrá que pagar con recursos propios o concesiones y que le serán impuestas en su momento.

Es necesario considerar que esta guerra no es una acción deliberada de Rusia, sino que responde a las acciones de ocho años atrás, cuando los ucranianos efectuaron diversos actos de agresión en contra de las ciudades de Donest y Lugans, y que en defensa de esos territorios hubo de imponerse a esa realidad.

Se esperaba y sucedió, la presencia de Xi Jinping y la de Vladimir Putin, junto con la Narendra Modi.

La guerra de Ucrania es producto de los intereses geopolíticos del imperio, que esconde la mano de ser el alimentador del conflicto.