El Colegio de Bachilleres se encuentra en el sistema de la educación media superior junto con otros subsistemas como el Centro de Bachillerato Tecnológico Industrial y Servicios (CBTIS), el Sistema de Telebachilleratos Comunitarios, las preparatorias estatales, las preparatorias de las Universidades Autónomas (Universidad Autónoma de Yucatán, Universidad Autónoma de México, Universidad Autónoma de Nuevo León, Universidad Autónoma del Estado de México, entre otras), Colegio Nacional de Educación Profesional Técnica (CONALEP) y Centro de Estudios Tecnológicos Industrial de Servicios (CETIS).
El Colegio de Bachilleres fue fundado en la Ciudad de México en el año de 1973, esto con la intención de hacer frente a la fuerte demanda de la matricula estudiantil de aquel momento y que los Colegios de Ciencias y Humanidades (CCH) de la UNAM y la Preparatoria Nacional de la máxima casa de estudios del país no daban abasto con el crecimiento poblacional de los escolares de la capital. A partir de esto, el gobierno federal ordenó la creación de este subsistema para así brindar el servicio a un mayor número de futuros estudiantes.
El proyecto, posteriormente, fue extendiéndose y se edificaron diferentes planteles con este subsistema en los 31 estados de la República Mexicana, destacando Chihuahua, Estado de México, Campeche, Hidalgo, Puebla, Nuevo León, Chiapas, Quintana Roo, Michoacán, Veracruz, Baja California, San Luis y Yucatán, sólo por mencionar algunos.
En el caso de Yucatán, es conocido como Colegio de Bachilleres del Estado de Yucatán (COBAY), el cual fue inaugurado en el estado por el gobernador Graciliano Alpuche Pinzón, siendo el plantel COBAY – Chenkú el primero en abrir sus puertas, teniendo su primera sede en las instalaciones de la Secundaria Estatal “General Salvador Alvarado”, para posteriormente recibir su edificio propio en su actual locación. Posteriormente, durante la administración de Víctor Cervera Pacheco, se crearon los COBAY de Santa Rosa, Xoclán, Tekit, Rio Lagartos, Peto, Tzucacab, Progreso, Chicxulub Pueblo, Valladolid, Tizimín, Tekax y Muna.
La importancia de los planteles COBAY radica en su estrecha relación con la formación académica de muchos jóvenes de Yucatán, pues ha facilitado el acceso a la educación tanto a los jóvenes de la capital yucateca como del interior del estado, permitiendo que puedan continuar sus estudios después de su paso por la educación Secundaria.
A lo largo de su historia, estos planteles han sido una segunda casa, tanto para los alumnos, como para el personal administrativo, manual y para los maestros; de la misma forma, de estas escuelas han egresado importantes profesionales para la sociedad yucateca, ejerciendo profesiones como médicos, arqueólogos, odontólogos, docentes, historiadores, abogados, contadores, nutriólogos e ingenieros entre otros.
El COBAY, como los colegios de Bachilleres a nivel nacional, se rige por una malla curricular de asignaturas obligatorias como son Matemáticas, Taller de Lectura y Redacción, Literatura, Historia de México, Historia Universal Contemporánea, Geografía, Introducción a las Ciencias Sociales, Química, Ética y Valores, Filosofía entre otras más, construyendo una educación integral en el estudiante dentro de los tres niveles de bachillerato. De la misma forma, cuenta con especialidades que los alumnos escogen en su último año de estudios y que les dotan de herramientas para el campo laboral a su egreso. Estas son Sociales, Físico-Matemático, Biológicas y Socioeconómicas.
Para concluir, es importante reconocer la importancia que tienen los Colegio de Bachilleres dentro del sistema de preparatorias de nuestro país, ya que surgen como una alternativa que facilita el acceso a la educación de diferentes comunidades. Así mismo, su completo plan de estudios responde a los intereses y necesidades que demanda la sociedad de nuestro tiempo.
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