Reseña del libro En busca de María Uicab. Reina y Santa Patrona de los mayas rebeldes

¿Qué relación hay entre Benito Juárez, Dionicio Zapata, el General Ignacio Bravo, Victoriano Huerta, la Reina Victoria de Gran Bretaña y María Uicab? En esta obra se desentrañan las relaciones en las cuales convergen todos estos personajes. Benito Juárez por su parte, era el presidente de México cuando se da la orden de perseguir a María Uicab, el general porfirista Ignacio Bravo comanda un ejército para invadir Santa Cruz X´Balam Naj, hoy conocida como Carrillo Puerto; Victoriano Huerta invade Tulum y arrasa con los últimos campamentos de los cruzo´ob, al mismo tiempo reinaba en Gran Bretaña la reina Victoria. 

Es, precisamente, la Reina Victoria con quien María Uicab tiene relaciones comerciales internacionales, pues a cambio de armamento; que se adquiría en Belice, María Uicab le proporcionaba recursos naturales producidos en las selvas de Yucatán; tales como el palo de tinte. Tanto el general Ignacio Bravo como el general Victoriano Huerta; ambos porfiristas y reconocidos por su lucha en la Revolución Mexicana, reciben la encomienda de apaciguar a los llamados mayas rebeldes, quienes se autodenominaban cruzo´ob. 

La novela titulada En busca de María Uicab. Reina y Santa patrona de los mayas rebeldes es una novela histórica que da cuenta de la resistencia indígena sobre el territorio maya, aborda los últimos años de la Guerra de Castas que duró de 1847 a 1901; resulta importante tener en cuenta que no son esos los únicos años de resistencia indígena, puesto que los españoles llegaron a costas mexicanas en 1519. Por lo tanto, se trata de una resistencia que duró siglos y es precisamente María Uicab la última mujer gobernante que, con el estandarte de la resistencia, encabeza varios pueblos y comunidades en la lucha por su autonomía, de una manera magistral en la cual las mujeres de ese tiempo no estaban acostumbradas, pues el rol de la mujer en México durante el siglo XIX se limitaba a ser buena esposa y madre. 

La historia tiene el equilibrio perfecto entre una crónica y una novela histórica, el cual sólo puede lograrse gracias a sus autores. La maestra Georgina Rosado es una profunda conocedora de la antropología social; antropóloga de formación, especialista en investigaciones sobre la mujer y la cultura maya entre otros temas. Carlos Chablé, por su parte, es cronista de formación autodidacta, y juntos provocan un texto con los ingredientes exactos para mantener el realismo de una crónica, sin dejar de lado el sentimentalismo, ni la parte humana de una novela. 

María Uicab es un personaje aludido a lo largo del texto. Todos hablan de María Uicab o se dirigen a ella; sin embargo, ella no tiene diálogo en el libro, pero habla a través de las voces de distintos personajes, quienes nos dejan ver su perfil. Era una reina que no gobernaba por descendencia o herencia, sino por decisión de los dioses, una reina que al mismo tiempo era sacerdotisa, porque seguía las enseñanzas y mandamientos de las cruces, era una mujer sabia y respetada; al mismo tiempo era la jefa militar del lugar que ella habitaba, Muyil; e incluso, de toda la costa de lo que hoy conocemos como Quintana Roo. Poseía gran poder de convocatoria para llamar a una reunión de Halaches en Tulum y ordenar sobre ellos. Mujer de autoridad indiscutible, la cual poseía excelentes relaciones internacionales, incluso con reinos de otro continente, por lo tanto, era capaz de comandar la política internacional y comercial de su reino.

Para contextualizar la época histórica en la cual se desarrolla la novela, tenemos a Benito Juárez como presidente de México; como gobernante de Yucatán se encontraba Manuel Cicerol y Canto; Quintana Roo formaba parte del territorio y gobierno de Yucatán. Corría el año de 1871 cuando se da la orden de acabar con los traidores, que era como se conocía a los mayas rebeldes y se emprende la búsqueda de María Uicab, ofreciendo incluso una recompensa. Ante esto, María fue capaz de enfrentar lo que, tal vez, para cualquier humano represente una de las pruebas más fuertes y difíciles, la tortura y asesinato de su hijo de manera pública y a pesar de ello, continuar la lucha que le fue encomendada por las santas cruces. 

Pensemos ahora en la cosmovisión de los cruzo´ob como un sincretismo en el cual se puede ver la influencia de la religión católica y al mismo tiempo el recuerdo vivo y adoración a los dioses mayas. En este sincretismo es posible identificar su cosmovisión y cosmogonía tanto de la creación del universo, como su lugar como humanos que son parte de la naturaleza. Durante la lectura del texto, es imposible no recordar las palabras del jefe indio Toro Sentado, de la tribu Sioux, quien se ve a sí mismo y ve a su tribu como parte del entramado de la naturaleza. Las palabras tan hermosas con las cuales se refieren a la naturaleza los hace ver como hermanos de y no como dueños de ésta, ni como alguien con el poder de apropiarse de ella y de exterminarla, sino como personas que tienen la responsabilidad de cuidarla, protegerla y de amarla. 

Es posible clasificar el libro En busca de María Uicab. Reina y Santa patrona de los mayas rebeldes como un texto histórico, pues aborda un fragmento de la historia de México, nos habla de una parte poco difundida de la historia, ignorada en los libros de texto y, por lo tanto, casi desconocida. Nos ilustra también sobre la forma de vida de las personas, sus interrelaciones y hasta sus peinados. A lo largo del texto se defiende el amor y la armonía con la madre tierra Lu’um, demostrando que formamos parte de ella, lo cual tendría que rescatarse en estos tiempos en los que con facilidad se derriban árboles, se exterminan selvas, se secan arrecifes. Nos exhorta de forma indirecta a retomar la cosmovisión de las antiguas culturas. 

El rol de la mujer en este texto es un tema digno de subrayar, pues a pesar de no ser un texto feminista, demuestra la importancia de la mujer para los mayas. Para los mexicas, una cultura contemporánea a los mayas, no era común tener una gobernante mujer, de hecho se tiene registro únicamente de una mujer gobernante de ese imperio, se trata pues de Atotoxtli, hija de Moctezuma Ilhuicamina y olvidada por un simple hecho, el ser mujer. Sin embargo, para los mayas, el papel de la mujer podía ser más dominante y relevante. Se tienen registros de mujeres mayas gobernantes, tal es el caso de Ix Yohl Ik´nal, gobernante de Palenque así como de Ix Sak Kuk y de K´awiil Ajaw gobernante de Cobá, por mencionar a algunas. La importancia de María Uicab reside en haber sido gobernante maya de Muyil, la última gobernante maya, muy amada y aclamada por su pueblo e incluso apoyada por los Halaches aledaños. 

La novela escrita por Rosado y Chablé es un texto redactado en su mayoría en primera persona, lo cual lo hace un texto exquisito y fácil de disfrutar; sin embargo, hay que resaltar el esfuerzo de sus autores, ya que es una de las formas más difíciles de creación. Nos habla del último territorio nacional en resistencia indígena. Se tiene registro y está presente en la memoria de los mexicanos el nombre del último gobernante mexica e incluso hay calles o colonias que llevan el nombre de Cuauhtémoc, pero María Uicab es poco conocida; allí reside la importancia de este texto, recordar a la última gobernante, la última en resistencia por la autonomía indígena y que fue mujer: María Uicab. Se tiene conocimiento y registros del largo periodo que resistieron los Incas a la invasión española pero se olvida y poco se habla de que en México aún en el siglo XIX había mayas que se resistían a estar bajo el dominio de otra nación. 

Durante el texto hablan desde diferentes voces de diferentes personas; tal es el caso de Antonia, quien era la escribana de la Santa Patrona (denominada así por ser la interlocutora entre el pueblo y las cruces). Antonia, quien había convivido con María desde su infancia, fue hecha prisionera en Zací, hoy Valladolid y estando en ese estado escribe un texto dirigido a María Uicab, un texto a modo de carta póstuma, al terminar la escritura decide terminar su vida haciendo honor a la diosa Ixtab, la diosa del suicidio. Otra de las voces que hablan a María Uicab es la de Josefa, quien era una mujer conversa y narra cómo ella decide dejar su vida con ciertas comodidades en una hacienda de Zací para adquirir las costumbres y vestimenta de los cruzo´ob, rescatada y enamorada de un valeroso guerrero maya. En otro capítulo se presenta el texto de Crescencio Poot y de Bernardino Cen, quienes eran Halaches de otros territorios y hablan de la fiereza y valentía con la cual María Uicab defendió su territorio. 

En busca de María Uicab, se presenta con palabras de fácil lectura que siembran la necesidad de conocer e investigar más; por ejemplo, se hace alusión al museo de Tihosuco, en el cual se encuentran los restos de Bernardino Cen. Así mismo, tiene una riqueza indiscutible porque está escrito en dos idiomas, en español y en maya, lo cual es de suma importancia para su reconocimiento como parte de una cultura que ha sobrevivido a lo largo de los siglos y de la historia. Es una forma de demostrar cómo sobreviven las semillas de la cultura maya, el texto es una germinación que va a florecer en la medida en que tenga lectores.

Nacida en la ciudad de México, playense por decisión desde hace 25 años. Licenciada en Pedagogía por la Universidad Pedagógica Nacional, con especialidad en el área de lengua y literatura. Inicia su  camino en la docencia desde el año 2008 adquiriendo experiencia desde el nivel básico hasta el nivel superior en impartición de talleres, pláticas y cursos.  Su gusto por la literatura e historia ha contagiado a las generaciones que han pasado bajo su guía. Actualmente se encuentra laborando en la UTRM como docente de asignatura.