A 34 años de la publicación de «Memorias de un combatiente social», de Antonio Betancourt Pérez

Han existido una gran cantidad de personajes a lo largo de la historia política y social de Yucatán de principios y mediados siglos XX. Entre los más destacables podemos nombrar a los exgobernadores Gral. Salvador Alvarado, Felipe Carrillo Puerto, Prof. José González Beytia; asimismo, tenemos políticos y académicos tales como Elmer Llanes Marín, Leopoldo Peniche Vallado, Humberto Lara y Lara alias “El Gato”, entre otros. A través de la revisión de sus memorias, el personaje que protagonisa estas líneas es un actor político muy peculiar, hablamos de Antonio Betancourt Pérez (1907-1997), quien fue un profesor, luchador social, historiador y periodista. Nació en la ciudad de Mérida, Yucatán, México, y falleció en 1997, igual en la capital yucateca. A lo largo de su obra, Memorias de un combatiente social, publicada en 1991, conoceremos un poco más de la vida de este relevante protagonista del escenario político yucateco del siglo pasado.

Memorias de un Combatiente Social comienza hablándonos de los primeros pasos y el ambiente familiar y social de Antonio Betancourt. En esta primera parte el autor nos relata que su padre fue Cloridano Betancourt y Varona, un exiliado cubano que luchó en la guerra de independencia de la Isla entre 1868 y 1878. Éste migra a Yucatán después de la paz del Zajón, la cual no fue aceptada por muchos excombatientes cubanos. Su madre fue Manuela Pérez Ortega de Betancourt quien provenía de una familia de liberales puros. Todo ello influyó, dice el mismo Betancourt Pérez, en su formación, debido a que creció en un ambiente familiar donde su padre le contaba sus historias de lucha y se escuchaban nombres de patriotas cubanos como Carlos Manuel de Céspedes, Ignacio Agramonte, Antonio Maceo, Máximo Gómez y José Martí, entre otros. También menciona que su padre tenía una pequeña fábrica de jabones donde trabajaba junto a él y que juntos representaron el único sustento económico para su familia.

De la misma forma, en esta primera parte la obra nos menciona acontecimientos históricos como la fundación del Instituto Literario del Estado en 1867; la venida a Yucatán de José Vasconcelos, primer titular de la Secretaria de Educación Pública (SEP) y el fusilamiento del ex gobernador y fundador del Partido Socialista del Sureste (PSS), Felipe Carrillo Puerto.

El mismo Betancourt nos menciona en el resto del libro su paso como estudiante de Educación Media, su elección como presidente del círculo de estudiantes a sus 18 años. También narra su papel en la creación de la Federación Estudiantil Yucateca (FEY), su pasó por la Escuela Normal que en ese momento dependía de la Universidad Nacional del Sureste (UNS) (hoy Universidad Autónoma de Yucatán, UADY). También nos comparte su vida como profesor en la Escuela Secundaria Agustín Vadillo, su relación con varios gobernadores de Yucatán como Álvaro Torres Diaz (1925-1930), Bartolomé García Correa (1930-1934) y otros sucesos con políticos yucatecos y nacionales como su informidad con Plutarco Elías Calles, la aprobación del reparto agrario del presidente Lázaro Cárdenas, así como su experiencia internacional tras obtener la beca para estudiar en la Unión de Repúblicas Socialistas Soviética (URRS). En este capítulo de su vida, nos cuenta su difícil regreso a Yucatán por la tensión de la guerra fría y, sobre todo, hace hincapié en que nunca se quedó callado y que sus inconformidades las publicaba en la Revista Yucatán (RY).

También, a lo largo de la obra, Antonio Betancourt Pérez describe el malestar del pueblo y el sectro obrero yucateco. Expone lo ocurrido en el mes de septiembre de 1935, con el Sindicato Peninsular de Ferrocarrileros durante el gobierno del licenciado Alayola Barrera (1934-1935). Incluso, en el texto, Betancour Pérez critica la modificación del artículo 3º constitucional de la educación, al magisterio, la llamada institucionalización de la revolución del gobierno federal y a la política en torno a la administración de Miguel Alemán Valdez.

De la misma forma, en Memorias de un combatiernte social etancourt Pérez se opone a la imposición de Tomás Marentes Miranda (1951-1953). Durante el tiempo que duró el “Marentismo” criticó abiertamente la intromisión de Miguel Alemán Valdez para imponer a Marentes y desaparecer al Partido Socialista del Sureste (PSS) para que sea absorbido por el Partido Revolucionario Institucional (PRI). Fue reacio opositor de Marentes Miranda, tanto que cuando éste renuncia por órdenes del nuevo presidente Adolfo Ruiz Cortínez, Betancourt menciona que Marentes no pudo gobernar solo y necesitó la ayuda de Alemán. Posteriormente, en el libro igual critica algunas políticas del gobernador Víctor Mena Palomo (1953-1958).

Antonio Betancourt Pérez fue un político y luchador social muy critico. Perdería la vida en la ciudad de Mérida en 1997. Pese a ser un personaje controversial para su tiempo fue de suma importancia. Muestra de eso es que varias escuelas tienen su nombre en su honor, siendo la Normal Superior de Yucatán (ENSY) la más importante y conocida en el Estado y la Península. Hoy en día, como buenos yucatecos y como personas críticas debemos conocer su vida y su legado, por lo cual, si tienes la obra Memorias de un Combatiente Social, debes saber que tienes un tesoro de la literatura yucateca. Para concluir, este texto es muy difícil encontrarlo, pero lo puedes encontrar en algunas bibliotecas públicas como la delCIR Sociales: Centro de investigación de Ciencias Sociales de la UADY y la BCCSEAH: Biblioteca del Campus de Ciencias Sociales y Económico Administrativo y Humanidades de la misma casa de estudios, así como algunas bibliotecas privadas destacando la Casa de Libros José González Beytia (CJGB).

Licenciado en Historia por la Facultad de Ciencias Antropológicas de la Universidad Autónoma de Yucatán (UADY). Titulado con la monografía: “El Marentismo en Yucatán,1951-1953”, tiene varias conferencias y ponencias en la Feria Internacional de Lectura Yucatán (FILEY). Tiene varios artículos en revistas locales y diarios locales en los que destacan: “El Marentismo: la entrada formal de Yucatán al Sistema Político Mexicano, 1951-1953” y “La caricatura política durante el Marentismo en Yucatán: 1951-1953” ambos publicados en la revista de la UADY y en el Diario de Yucatán, en el Diario Informe y el Diario Por Esto!, publicaciones tales: el artículo “Peto, un pueblo emblemático del sur de Yucatán” publicado en el Diario Por Esto! En Mérida, Yucatán, México el 28 de abril de 2020; el artículo “La caricatura política en Yucatán, El caso del régimen marentista” publicado en el Diario de Yucatán en Mérida, Yucatán, México el 29 de noviembre de 2020; y el artículo “Tensiones entre el Marentismo y la Universidad Nacional del Sureste” publicado en el Diario Informe Fracto en Mérida, Yucatán, México el 8 de abril de 2021. Además, cuenta con cursos de didáctica y docencia y un diplomado. Además, es ganador del reconocimiento “Historiador Pedagógico 2022” otorgado por la Facultad de Antropología de la UADY. Actualmente está adscrito al Subsistema de Secundarias Técnicas de la Secretaria de Educación Pública del Estado de Yucatán (SEGEY) como profesor de historia.