Para 1896 ya eran más de 40 los internados en Canadá que recibían un pago por cada niño indígena que albergaran, esto originó a que se “pelearan” por ellos y se llegara al extremo de secuestrarlos.

Muros, naturales o creados por el hombre, han delimitado y propiciado la separación de los seres humanos a través de la historia. Argumentos son muchos: raza, religión, idioma, pensamiento, economía y otros muchos más, que han servido como pretexto y justificación para “aislar” y “proteger” a grandes masas, de los vecinos a quienes se considera diferentes o peligrosos.

La familia Moghrabi compuesta por el padre Kamel, su esposa Haniya, las dos hermanas de ella y ocho de sus nueve hijos se despertaron en la madrugada del 27 de abril de 1948 y partieron apresuradamente en dos vehículos hacia la frontera del Líbano. El viaje desde Akka en Palestina, hacia la ciudad de Bent Jubail habitualmente se hacía en una hora, ellos tardaron más de 20.

No todos tienen la suerte de llevar como tarjeta de presentación un nombre afín a su personalidad. Existen “Justos” poco equitativos, “Inocencias” nada ingenuas, “Luises” con escaso lustre y “Leticias” sin alegría. No es el caso de María de la Soledad Leona Camila Vicario Fernández de San Salvador, conocida simplemente como Leona Vicario.

—Mi padre intentaba apartarme de los libros, en cuanto me veía con uno en la mano… me buscaba tareas, fueran o no necesarias-, escribió Tara al recordar a su progenitor, un fanático mormón supremacista blanco y afecto a las armas...