Libros, libros, libros

Es increíble, queramos o no, cómo nuestra vida está relacionada con los libros, buenos o malos, de manera consciente o inconsciente. Lo cierto es que basta rebuscar un poquito en la memoria y encontraremos algún recuerdo con el libro que alguien nos regaló, aquel que vivos que leía nuestro abuelo o nuestra madre, el libro que leímos a escondidas, el que nos robamos en la biblioteca de la escuela o el que nos sirvió para escribir mensajes de amor. Sin duda estamos inmersos en una cultura del libro, aunque quizá un poco viciada, maniatada, deteriorada y hasta obsoleta.

La escuela, en los últimos tiempos, ha sido un elemento importante en nuestra relación con los libros. Si bien, en muchos casos ha servido para acercarnos a su lectura, en otros, ha servido para fomentar los prejuicios y malos hábitos en torno al acto de leer. La mala fama de la lectura, como tarea u obligación se la debemos al sistema educativo que le quitó su carácter divertido y libertario, nos negó a muchas generaciones descubrir el poder de la palabra y la imaginación.

Las bibliotecas, por su parte, resultan en muchas ocasiones espacios incomprendidos, después de muchos programas y políticas públicas, muchas instituciones siguen sin entender que las bibliotecas son espacios vivos, que requieren el acercamiento entre el libro y el lector, y más cuando estos son niños. Por supuesto, para esto se requiere infraestructura, personal capacitado, recursos, pero, sobre todo, sensibilidad y pasión por los libros y la lectura.

Está demás decir que a los libros en Latinoamérica se les han querido poner cadenas y condenas, hay títulos que se han prohibido y exterminado en ciertos países, multiplicando su lectura clandestina y ventas en otros países; se les tratado como objetos de lujo con impuestos que parecen sentencias de muerte, pero aun así han sobrevivido. Los libros han sobrevivido a los autos de fe, a las dictaduras, a los imperios, y se han transformado según los tiempos.

Sin embargo, hoy estamos en una etapa de transición, en donde el libro impreso ya no es la única vía, los E-Reader son una opción, sobre todo para las nuevas generaciones, en el que pueden llevar consigo hasta dos mil títulos y casi con la misma funcionalidad; por supuesto, las generaciones de lo impreso aun deseamos sentir el papel y el olor a la tinta. Pero es innegable que hoy se publique y se lea en otros formatos, como sucedió con la llegada de la escritura y después, de la imprenta.

Por todo esto, en Lectámbulos dedicamos esta edición de abril a los libros en todas sus acepciones y formatos Libros, libros, libros, con la intención de provocar el recuerdo, la experiencia, las lecturas, porque libro sin lectura es palabra muerta.

Verónica García Rodríguez
Nació en Mérida, Yucatán el 3 de enero de 1978. Licenciada en Educación Secundaria con la especialidad en Español por la Escuela Normal Superior de Yucatán y Maestra en Cultura y Literatura Contemporánea de Hispanoamérica por la Universidad Modelo. Diplomada en Competencia Lectora: un Enfoque para la Vida y el Aula (Tecnológico de Monterrey, 2013); Investigación Literaria con enfoque de estudios culturales (Univ. Modelo, 2008); Periodismo, protocolo y Literatura (IECY, 2004-2005) y Literatura y Crítica Literaria (ICY-Santillana, 2002-2003). Actualmente, estudia el Doctorado en Ciencias Filosóficas en la Universidad de la Habana. Narradora, poeta y editora. Ha recibido el Premio Estatal de Cuento Corto El espíritu de las Letras (2015); el Segundo Lugar del Premio Nacional de Cuento Jesús Amaro Gamboa (2005); el Premio Estatal de Poesía Joven Jorge Lara (2005) y la beca del Programa Creadores del Fondo Estatal para la Cultura y las Artes de Yucatán (FOECAY- 2004). Becaria en dos ocasiones del Programa de Fomento y Coinversiones Culturales del Fondo para la Cultura y las Artes en 2006 y 2016, la primera por su proyecto Palabra Viva (2005-2008) para mujeres internas, jóvenes acusados de delitos violentos y enfermos de VIH y SIDA internos en el Cereso de Mérida. La segunda, fue por el proyecto Ko’olelo’ob, migrantes del tiempo que tejió un puente de memoria a partir de la palabra entre hijas, madres y abuelas de cuatro comunidades mayas de Yucatán. Es presidenta de Zedík, A. C., miembro del Centro Yucateco de Escritores, A. C. y miembro distinguido del Colegio de Profesores de Educación Básica de Yucatán, A. C. por su labor educativa dirigida generar estrategias de fomento a la lectura con niños, como el proyecto Kanules del Mundo Maya (2012-2018) y públicos vulnerables. Titular la cápsula radiofónica A salto de página, en Grupo Rivas dentro del noticiero Arcadio en la Radio, un breve espacio dedicado al placer de la lectura (2013-2016). Ha participado como ponente y conferencista en diversos encuentros y coloquios nacionales e internacionales de escritores y de educación. Coordinadora fundadora de la Escuela de Creación Literaria del Centro Estatal de Bellas Artes y de su programa de formación (2008-2011), así como del programa Biblioteca Básica de Yucatán de la Secretaría de Educación del Gobierno del Estado de Yucatán (2009-2013) y de la Unidad Editorial de la misma Secretaría de 2013 a 2018. Creadora y organizadora del Foro Regional Educación y Cultura, con el tema En los espacios que habitamos en octubre de 2014 y La filosofía y la imaginación en las lenguas originarias de América en 2016; asimismo del Coloquio Internacional de Filosofía de la Ciencia y de las Grandes Ideas en octubre de 2015 y que en su emisión del 2017 llevó el subtítulo Cosmogonías de los pueblos vivos de América; y el Seminario Internacional de Periodismo que reúne a colaboradores del periódico Por Esto!, evento que se realiza desde 2015. Directora editorial del suplemento infantil MUNDOS del periódico Por Esto! (2016-2020) donde también publica artículos periódicamente. Entre sus publicaciones se encuentran Cartas a Sofía, epistolario filosófico para niños publicado por entregas en el periódico Por Esto!, el libro digital Ko’olelo’ob, migrantes del tiempo, hijas, madres y abuelas escribiendo la memoria (FONCA, SEGEY/2017), la colección infantil interactiva Kanules del Mundo maya (SEGEY/2012-2018), el libro de cuentos Vestido rojo y sin tacones (H. Ayuntamiento de Mérida/2008) y Memorias de mujeres en prisión y otros relatos (ICY, Zedík/2006), entre otros.