Los territorios, como los cuerpos femeninos, también han sido despojados de decisión y protección, como vemos en la lucha de los pueblos indígenas por la defensa de sus territorios ancestrales y los ecosistemas que han dado vida y salud a sus comunidades por generaciones. Así es como entendemos una de las famosas frases de este movimiento Ni la tierra, ni las mujeres, somos territorio de conquista.