Criterios e interrogantes respecto a la nueva normalidad en Cuba y en el mundo

Es evidente que vivimos una época muy específica en relación con lo que históricamente se han caracterizado las épocas que nos precedieron. En mis últimos artículos e intervenciones he insistido en esta afirmación, porque en mi opinión todo lo que escribamos al respecto de las realidades en que estamos insertados, necesariamente siempre ya no lo podremos concebir con los criterios tradicionales que hemos utilizado al respecto. En consecuencia, en lo adelante es posible que nos encontremos con consideraciones desfasadas de la realidad circundante por parte de los autores si no han cambiado la concepción básica de la realidad que los circunda y de los métodos a utilizar. Por aquí quiero comenzar mi reflexión sobre las interrogantes y criterios al respecto de la “Nueva Normalidad” en Cuba 2021, lo que en definitiva, dado que estamos en el mes de enero, siempre será una proyección en el tiempo.

En primer lugar, quiero expresar que, en la realidad del momento, todo lo que se plantee, como nunca antes está por ver, porque comenzamos desde los puntos de vista sociológico, político y especialmente económico en situaciones muy especiales afectadas por un 2020 que ha traspasado todos los límites que antes de la Pandemia eran lógicos y normales. Ahora en el desenvolvimiento de la sociedad, considero que nada va estar delimitado por lógicas y procedimientos con los que nos acostumbramos a analizar las realidades en sus proyecciones de futuro. Realmente el futuro con que comenzamos el año 2021 es incierto y siempre tendremos desde el punto de vista de las ciencias sociales que hacerlo de manera muy “explorativa” como nunca antes, porque en mi opinión vamos a encontrarnos con muchas situaciones totalmente inéditas en las que con los métodos que tradicionalmente en la sociología hemos analizado las situaciones concretas de la sociedad y nos ha sido posible plantear pronósticos más o menos acertados. Ahora nuestros pronósticos necesariamente se tendrán que mover por el mundo de lo inédito. El concepto “explorativo” que utilizo en este párrafo es una nueva herramienta a usar en los análisis de lo inédito que pueda producirse al respeto. Cuando hablo de lo inédito no me estoy refiriendo a lo inédito que siempre es posible encontrar en los análisis tradicionales por mencionarlos de una forma más adecuada, a lo nuevo de la Nueva Normalidad y valgan las redundancias necesarias desde el punto de vista científico de lo que será la sociología en lo adelante.

En términos más humanos, quiero referirme brevemente a lo que la naturaleza nos está “planteando”, porque la Madre Tierra siempre tiene fórmulas para comunicarse con sus hijos, muy especialmente en los momentos culminantes de la historia de la humanidad, así lo digo por expresarme en términos más adecuados para este análisis “movedizo” que estoy planteando para Lectámbulos que, en mi opinión es una revista eminentemente culta en la que la ciencia más avanzada es lo cotidiano en sus análisis y reflexiones que publica, porque una de sus misiones es coadyuvar efectivamente al desarrollo cultural y científico de sus lectores.

Otras veces, me he referido a la importancia que ha tenido para la historia y especialmente para la ciencia que los humanos hubiéramos inventado el “registro” tan necesario para asentar más allá de la memoria que siempre humanamente se puede olvidar, los descubrimientos y análisis que se vayan efectuando al respecto de la realidad en el tiempo. Pues bien, quizás algunos no hayan pensado todavía, que Lectámbulos ha de ser en lo adelante una especie de Registro sociopolítico, cultural y económico de los que nos vayamos encontrando en las nuevas normalidades por las que tengamos que transitar en lo adelante; en las qué México, siempre lindo y querido para los cubanos y Cuba siempre digna y socialista, nunca seremos una excepción en las nuevas normalidades en donde nos va a exponer la Madre Tierra su mensaje en estos momentos de auxilio necesario y de severas advertencias dadas las circunstancias.

Tener una específica y adecuada concepción holística del mundo y de sus realidades que siempre han sido esenciales en mi criterio, pero que ahora más que nunca porque hemos expoliado en extremos la naturaleza de nuestro planeta; y las consecuencias que se nos están presentando son evidencias cada vez más continuadas. La Pandemia de marras que ha surgido en nuestro 2020 planetario posee características únicas e inéditas y muy a pesar de todo lo que ha sido estudiada en el transcurso del presente año. hay aspectos aún ocultos y otros que ya están siendo descubiertos por la ciencia que van a determinar modos de vida inéditos.

Finalmente quiero expresar en resumen brevemente lo que el 2021 debe representar para la humanidad, para Nuestra América y específicamente para los que escribimos regularmente en Lectámbulos:

  • En general será un año de luchas contra la pandemia de la Covid 19 que todo indica que no nos va abandonar. Además, debe ser el año de las vacunas y debe ser un tiempo en el que la misericordia y la solidaridad debe ponerse más aún al orden del día, porque como nunca antes será necesario defendernos de esta terrible enfermedad y de todas las consecuencias del maltrato que durante años le hemos infringido a la Madre Tierra.
  • Será un año de recuperaciones, en primer lugar de la Economía, que ha sido severamente afectada por los encierros necesarios para defenderse de la COVID-19, así como un año en el que como nunca antes será imprescindible reconciliarnos con la Madre Tierra.
  • Para Nuestra América vislumbro que será el año del regreso de las izquierdas al poder, en un reflujo positivo y será muy importante no volver a cometer los errores que determinaron el ascenso de las derechas.
  • Para Lectámbulos en mi opinión personal será un año esencial de consolidación que nos exigirá mayor consecuencia con el significado esencial de su fundación.

 Feliz y provechoso año 2021 para todos, sin excepciones.

Licenciado en Ciencias Sociales, especializado en Economía, y licenciado en Estudios Bíblicos y Teológicos. Corresponsal Permanente en Cuba de la Revista Tiempo de Paz de la cual es miembro de su Consejo de Redacción. Publicación trimestral del Movimiento por la Paz, el Desarme y la Libertad (MPDL de España). Sociólogo, teólogo laico y periodista, con múltiples crónicas y artículos periodísticos publicados en diversos órganos de prensa de Cuba y otros países, principalmente España. Ha colaborado con publicaciones del Sur en Andalucía España; ha colaborado con el periódico POR ESTO!, Mérida, Yucatán y su suplemento cultural Unicornio, en donde publicó sus memorias por entregas semanal con el título La Espiritualidad Prohibida. Además, colabora también con las revistas católicas en Cuba tales como VITRAL de la Diócesis de Pinar del Río y Laboren Voz del Movimiento de Trabajadores Cristianos. Cuba. MTC; La Agenda Latinoamericana de la Teología de la Liberación. APIC Alternativa. Agencia de Prensa Continental. Missione Oggi del Centro Saveriano de Animación Misionera de Roma. Tiene publicados varios libros en España: Sin Tiempo para Morir (novela testimonio) 1999; Evangelio y Revolución, en colectivo de autores con Pedro Casaldáliga y Benjamín Forcano, 2000; Cuba: Problemas y Retos, 2001; Palabras de Esperanza, 2005; Futuro del Socialismo y la Religión Cristiana en Cuba en colectivo de autores 2001; todos en la Editorial Nueva Utopía de Madrid; Curso de Administración y Gestión de Proyectos ISEBIT La Habana. Socialismo y reconciliación en Cuba. Una mirada desde adentro, Editorial los Libros de la Catarata, Madrid 2007. Tiene terminados y pendientes de publicación los textos: Ética Política Cristiana y Revolucionaria, Periodista Soy, no puedo negarlo; Militante soy, no puedo negarlo; y Cristiano Soy, no puedo negarlo. Ha trabajado en actividades políticas, de prevención social y preservación de la Paz en instancias intermedias y nacionales de Cuba. Es militante fundador del Partido Comunista de Cuba y miembro de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana, ACRC. Fue director del Semanario Mella 1964, del periódico Juventud Rebelde 1965-1966, La Habana; director de la revista cultural El Caimán Barbudo (1966), La Habana; director del periódico “El Bayardo” de Camagüey 1970; Director Nacional de Escuelas de Arte y Vicepresidente del Consejo Nacional de Cultura de Cuba (1972), Vicepresidente del Poder Popular en la Isla de la Juventud (1975), Director fundador de la Editorial José Martí de Publicaciones en Lenguas Extranjeras (1982), La Habana, así como profesor de Cooperación al Desarrollo y de Ética Cristiana en el desaparecido Instituto Superior de Estudios Bíblicos y Teológicos La Habana.